Informe del Pnud y la OEA revela dramáticas cifras sobre democracia en la región.
El segundo informe 'Nuestra democracia', elaborado por el Pnud y la OEA reveló que el Congreso colombiano es el órgano legislativo en América Latina en el cual hay menos mujeres
El informe abarcó, además de aspectos democráticos, otros factores de la vida de los latinoamericanos.
Según el estudio, América Latina tiene tres grandes desafíos por delante: articular nuevas formas de participación política, fortalecer la independencia de poderes e incrementar el poder político real del Estado.
Dentro de las mediciones que soportan el informe, una de las más preocupantes es la baja participación de las mujeres en los Parlamentos de la región. En este tema, Colombia es uno de los países que peor librado salen, ya que sólo tiene una presencia de 11,8 por ciento de mujeres en el Senado, y 8,4 en la Cámara de Representantes.
En la medición de Senado, el país es penúltimo y en las cámaras bajas (Cámaras de Representantes) último.
En cuanto al porcentaje de mujeres en ministerios, Colombia ocupa el séptimo puesto entre 18 países. El Gobierno que más presencia femenina tiene es el chileno, en el cual hay un 40,7 por ciento de mujeres. Otro dato dramático es el porcentaje de ciudadanos que conciben la democracia sin partidos, es decir, que votan por un candidato, pero no necesariamente por una colectividad política.
En este tema existe un registro más preocupante aún: un 37,8 por ciento de los latinoamericanos no tiene "ninguna confianza" en los partidos políticos y otro porcentaje igual tiene "poca confianza" en ellos. Según el informe, "en América Latina la pérdida de protagonismo de los partidos ha estado directamente ligada con la pérdida de capacidad estatal".
27 por ciento de homicidios
Del total de los homicidios dolosos que se cometen en el mundo, el 27 por ciento son perpetrados en América Latina, una región que apenas cuenta con el 8,5 por ciento de la población global.
Más que 'mano dura'
El informe también alerta sobre los "altos niveles de inseguridad" en las ciudades de la región y los ubica como un "riesgo para la estabilidad de la democracia". También insta a los países latinoamericanos a "romper este complejo círculo", para lo cual, aconseja "superar el tono actual de la discusión sobre la inseguridad, que con frecuencia ha empezado a girar -sobre todo en épocas electorales- en torno de promesas de enfrentar el problema con 'mano dura'".
Juan Francisco Valbuena
Redactor de EL TIEMPO
Redactor de EL TIEMPO
F eltiempo.com
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