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Por Alister Bull y Caren Bohan
WASHINGTON (Reuters) - El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el domingo que era muy pronto para juzgar si un incremento de tropas estadounidenses en Afganistán estaba ayudando a ganar la guerra en ese país e insistió que no guardaba rencor hacia el general Stanley McChrystal.
El presidente Barack Obama destituyó el mes pasado a McChrystal después de conocerse declaraciones en las que el militar se burlaba de Biden.
"Yo no era el payaso. Era el hombre que era su problema, según pensaban ellos. No soy su problema", dijo Biden al programa de ABC News, "This Week".
También en la entrevista, Biden señaló que la fecha de julio del 2011, que Obama estableció como plazo para el retiro de las fuerzas estadounidenses de Afganistán, se mantenía firme.
Otros funcionarios estadounidenses han dicho en las últimas semanas que cualquier retiro estaría basado en las condiciones de seguridad en el terreno y han destacado que la fecha buscaba enviar un mensaje a Kabul sobre la urgencia de asumir la responsabilidad por la seguridad.
"Podrían ser apenas un par de miles de tropas. Podría ser más. Pero habrá una transición", dijo Biden a ABC.
La entrevista de McChrystal con la revista Rolling Stone expuso divisiones entre la Casa Blanca y el Ejército sobre cómo llevar a cabo la guerra en Afganistán.
Un asesor de McChrystal llamó al asesor de seguridad nacional Jim Jones un payaso que estaba "detenido en 1985".
"No lo tomé como personal en absoluto. Realmente, honesto ante Dios, no lo hice. Comparado con lo que ocurre en política, esto fue una tontería", dijo Biden.
Pero el vicepresidente señaló que la situación había dejado a McChrystal en una posición insostenible.
"Me reuní con McChrystal. El presidente se reunió con McChrystal. Se deshizo en disculpas. Sabía que se había excedido. Pero sabíamos que si un sargento hacía eso, si un teniente hacía eso - quiero decir que ninguno se podía quedar", dijo Biden.
Obama reemplazó a McChrystal al frente de las operaciones en Afganistán con el general David Petraeus.
Las tropas estadounidenses están encontrando una dura resistencia y sufren crecientes bajas por un resurgir de los talibanes, pese a un aumento en el número soldados desplegados en el país.
Biden dijo que era muy pronto para decir si la estrategia de reforzar las tropas estaba funcionando.
"Sabíamos que iba a ser un camino difícil. Pero creo que es muy prematuro hacer un juicio hasta que el Ejército diga que debemos evaluarlo, que es en diciembre", dijo Biden, y agregó que recién en agosto se completaría el aumento de tropas.
A medida que crece la cantidad de víctimas estadounidenses, las encuestas de opinión sugieren que las dudas entre los estadounidenses sobre la guerra están aumentando.
El número de estadounidenses que creen que vale la pena pelear en Afganistán declinó al 43 por ciento desde el 52 por ciento en diciembre, según una encuesta de ABC News-Washington Post.
F lta.reuters.com/article/worldNews/idLTASIE66H0GA20100718?sp=true
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